cesta001.jpgLas actuales frutas de Aragón, que ya se conocían en Zaragoza como bombón de frutas, son creación de Julio Asín, de la confitería "La Española", en la calle Don Jaime I, al pie de la torre mudéjar de San Gil. Las patentó antes de la última Guerra Civil y las vendía en unos roscaderos, imitación de los que empleaban los hortelanos para traer sus frutas al mercado de Lanuza.  

Asín fue el que hizo la tarta nupcial que se sirvió en la boda del rey Alfonso XIII y de Victoria Eugenia, su guapa y rubia novia inglesa. Las frutas de Aragón, que son frutas confitadas recubiertas de chocolate, se introdujeron y popularizaron de forma asombrosa.

Ahora son muchos las que las preparan, alguno quizás con rutina industrializada. Los ingredientes tienen que cumplir una serie de requisitos: las frutas pueden ser de manzana, pera, melocotón, albaricoque, cereza, higo, ciruela y naranja, azúcar, y chocolate con un contenido mínimo de  35% de manteca de cacao, sin que esté permitido el empleo de conservantes ni colorantes artificiales.

La fruta ha de ser jugosa, consistente y aromática y el recubrimiento del chocolate, perfectamente adherido a la fruta, debe representar un mínimo del 35% del peso. Las cestas con frutas de Aragón se han convertido en objeto de regalo y se han convertido en una estupenda embajada del nombre de ARAGON.

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